El ensayo es un género literario que sirve para informar, analizar, interpretar y argumentar al respecto de un tema específico. Aunque al redactar un ensayo no siempre puedes elegir de manera libre el tema, como cuando te lo dejan de tarea, sí le puedes dar un enfoque personal a partir de las ideas que plasmes.
Sabemos que quizá la palabra ensayo pueda intimidarte un poco, especialmente si no tienes muy claro cómo se elabora uno. Por tal motivo hemos preparado la siguiente lista con los 5 pasos fundamentales que te ayudarán a redactar ensayos académicos legibles, claros, precisos y contundentes.
Antes de comenzar a escribir es recomendable realizar un plan de trabajo y, por supuesto, definir qué tema te interesa abordar. Después tienes que delimitar el tema: elige sólo el aspecto que más te interese; de esa manera te será más fácil exponer tu enfoque, centrar tu atención y no perderte en la inmensidad de información.
En el plan de trabajo organiza los tiempos y recursos necesarios para cada una de las fases. Y también determina tu planteamiento del problema: ¿qué quieres comprobar/recalcar/informar/criticar en tu ensayo?
Una vez que tienes claro de qué te interesa escribir, es importante que busques fuentes de información que te permitan desarrollar ideas sustentadas, así como argumentos que le den soporte a tu opinión; así tendrás más credibilidad frente al lector.
En la investigación bibliográfica y cibergráfica que realices no olvides buscar qué se ha escrito sobre tu tema. Así podrás contrastar ideas y observar qué falta por decir o recalcar del tema que elegiste; y aunque parezca que todo está dicho, bajo tu mirada las cosas tendrán una perspectiva única.
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En principio, redacta una breve introducción en donde problematices un asunto y le digas al lector hacia dónde irá tu ensayo. Después continúa con el cuerpo del ensayo, en donde tendrás que exponer tu opinión, reforzada con citas directas o al pie de algunas de las referencias que previamente investigaste. Durante la elaboración del ensayo tu opinión argumentada es la base fundamental para enriquecerlo.
Una técnica de escritura que te ayudará a no perderte en este punto es estructurar tu ensayo en párrafos cortos donde separes muy bien tus ideas a través del punto y seguido y el punto y coma. Segmentar tus ideas te facilitará el trabajo a la hora de ordenarlas e ir tocando los puntos clave que mencionaste en la introducción.
Esta sección no siempre debe indicarse de manera explícita. Lo importante es que llegues a una conclusión, que puede ser o no definitiva, a partir de la cual quede clara tu postura frente al tema, así como los matices que te parecen más relevantes. Usa la reflexión y la persuasión para incidir en el lector, de modo que pueda entender tu texto e incluso modificar su opinión en el mismo sentido en el que tu ensayo está dirigido.
Contrario a lo que se acostumbra, te recomendamos elegir el título del ensayo hasta este momento, una vez que lo tengas casi listo. Así podrás adaptarlo de manera creativa a lo que escribiste; en cambio, si lo eliges desde el inicio podría limitar los alcances de tu ensayo.
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Cuando termines de escribir tu ensayo es recomendable que lo leas varias veces, de manera detenida, a fin de verificar que la idea principal responde al planteamiento del problema y tiene el enfoque que buscaste desarrollar desde el paso 1.
Asimismo, revisa tanto la sintaxis (que las ideas tengan coherencia al leerlas) como la ortografía (que las palabras estén bien escritas).
Si sigues estos pasos no sólo podrás mejorar tu capacidad de síntesis, comprensión y expresión de ideas, también desarrollarás tu habilidad de lectoescritura; es decir, la manera en la que te apropias del lenguaje escrito y lo comunicas de manera eficaz en distintos códigos, medios y soportes.
En el Colegio Indoamericano contamos con planes de estudios que te permiten desarrollar e incrementar tus habilidades cognitivas, así como el pensamiento crítico, reflexivo, creativo y propositivo, lo que te preparará de manera integral para la Educación Superior.