El diálogo entre padres e hijos adolescentes es muy importante, pues esto hará más fuerte la autoestima y confianza de tus hijos. Por esta razón, en el Colegio Indoamericano te explicamos la importancia de la sana comunicación y algunos tips para mejorarla.
Para hablar con los adolescentes es necesario crear el ambiente propicio y buscar el momento adecuado. Si se deja pasar la ocasión, porque “ahora no, que estoy ocupada” o “después me lo cuentas, que tengo trabajo” la oportunidad habrá desaparecido para siempre. Por eso, es decisivo que sepan que cuentan siempre con sus padres, que están ahí y que lo estarán siempre.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta que una investigación basada en una amplia encuesta entre adolescentes de 15 años, confirma que mantener una comunicación fluida con los hijos tiene efectos positivos en ellos como los siguientes:
- Tienen una mejor imagen de su cuerpo.
- Mejor consideración de su propia salud.
- Menos quejas con respecto a cuestiones físicas o psicológicas .
- Comportamientos menos agresivos.
- Menos probabilidad de consumir sustancias como alcohol o drogas.
Para llevar un buen diálogo es necesario:
- No decir ciertas frases
¿Qué frases de las que dices molestan más a tus hijos? Está claro que todos las conocemos, y que en el fondo pensamos que no las decimos, pero sí lo hacemos. "Te lo dije", "¡Qué decepción!", "Yo a tu edad"...
Recuerda que lo más importante es ser padres calmados, sobre todo ante hijos descontrolados. Cada frase que un padre o una madre dice a sus hijos tiene mayor significado pues proviene de las personas que nos dieron la vida. Por ello, debes cuidar tus palabras.
<< Frases que no debes decir a tus hijos adolescentes >>
- Aceptar sus formas
La primera serie de imágenes de escáner del cerebro adolescente se realizó a través de un proyecto de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH) que indagó el desarrollo de más de un centenar de jóvenes durante la década de 1990.
Se descubrió que entre los 15 y los 25 años los jóvenes les gustan las emociones fuertes, los riesgos y valoran mucho las relaciones sociales, por lo que probablemente no tendrá las formas más razonables para actuar; sin embargo, por increíble que parezca es parte de su desarrollo y debes lidiar con estas situaciones.
Los hijos tendrán probablemente salidas de tono, levantarán la voz o discutirán; por eso, la tranquilidad y la calma siempre la debes aportar tú.
<< ¿Cómo es el cerebro de un adolescente? >>
- Dar razones de peso para ellos
Mediante el diálogo se razona. No se trata de entablar batallas dialécticas, en las que pierde el que menos grita y no gana nadie, sino de razonar y hacer razonar. Pero eso no se consigue a base de poner sobre la mesa buenas razones desde un punto de vista, sino de presentar razones que tengan peso para ellos.
- Motivación dialogada
No se trata de hacer de cada conversación un sermón o una reprimenda, que generalmente no sirve para nada, porque el hijo ya está sobre aviso. Se trata en definitiva de estar siempre dispuestos al diálogo, no a echar sermones con motivo de las calificaciones la ropa o la música que escuchan, por dar solo algunos ejemplos.
- Aprender a escuchar
Alberto Chouza, consultor en Recursos Humanos, en su artículo "la importancia de saber escuchar" indica que no sólo se escucha con los oídos, se escucha con la mirada, con el cuerpo, con la respiración de la siguiente forma:
- 1% a través de la boca.
- 1,5% a través de las manos.
- 3,5% a través del olfato.
- 11% a través del oído.
- 83% a través del ojo.
En muchas ocasiones escuchar activamente conseguirá que ellos mismos se den las respuestas o las razones que necesitan para rectificar o mejorar su conducta.
En el Colegio Indoamericano sabemos cuán importante es la comunicación familiar en el desarrollo de los jóvenes y su desempeño académico; por ello, tenemos seguimiento y comunicación con los padres de familia para prepararlos mejor en sus futuras etapas.
Te invitamos a agendar una visita al colegio y conocer más sobre nuestra Preparatoria.